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Rosa, Celso. Ritmo y poesa en los bordes de la ciudad de So Paulo. Culturas
Populares. Revista Electrnica 4 (enero-junio 2007). http://www.culturaspopulares.org/textos4/articulos/rosa2.htm ISSN: 1886-5623 |
Ritmo
y poesa en los bordes de la ciudad de So Paulo
Celso Rosa
Doctor en Comunicacin y Semitica del PUC – So
Paulo,
Investigador del Centre de Estudios de la Oralidad del
PUC – So Paulo e
Profesor universitario del Centre Universitario FIEO
– So Paulo
Resumen
Estudio sobre la cultura joven creada en las
periferias de las grandes metrpolis en las ltimas dcadas del siglo XX, en
sus aspectos comunicativos, expresivos y sgnicos. Aborda el uso de la ciudad
como espacio pblico (borde) conectado con los discursos de los rappers.
Palabras clave: So Paulo, Brasil, rap, msica popular,
semitica, borde, mezcla de culturas.
Abstract
Study of youth culture from suburbs of big towns
during the last 3 decades of 20th Century, considering
communication, expression and sign aspects. Reflects upon the use of the city
as a public stage (border)
connected to the rappers speeches.
Keywords: So Paulo, Brasil, rap, popular music,
semiotics, border, fusion of cultures.
C |
uando hace casi treinta aos comenz a aparecer en
las calles de la ciudad de So Paulo un nuevo ritmo musical, el Rap, se esperaba que fuera otra nueva
manifestacin juvenil en la que dominara la rebelda, y cuyo impacto en el
paisaje de la ciudad sera pasajero. Igual que el movimiento punk brasileo, que surgi en las calles a
finales de la dcada de 1970, y que la sociedad y las instituciones brasileas
consideraron slo un modo de exhibirse y de dar a conocer cosas que causaban
extraeza social, que slo buscaban transgredir y, supuestamente, agredir a la sociedad.
Centro de la ciudad de
So Paulo. Fotografa de
Elcio Silva
No obstante, al contrario de
lo que se imagin, la msica Rap abri nuevas expectativas frente a una serie de cuestiones de orden social
en que una gran parcela de jvenes excluidos, o sea, los habitantes de los
bordes de la ciudad, se hizo presente.
En lugar de crear una msica
fcilmente asimilable por las masas, en la cultura Rap la elaboracin de los
temas busca responder a las expectativas de los jvenes de la periferia,
desarrollando una potica que narra hechos impactantes, con los cuales slo
podr identificarse quien pertenece a esos crculos. Adems, propone un modo de
identificacin social que fue intensa sobre todo en la primera generacin.
La msica es uno de los
vehculos de comunicacin social ms integradores, y tiene el poder de
congregar a grupos de personas que se identifican con los discursos y con los
sonidos. Independientemente del gnero, la msica se caracteriza por la
reaccin que causa entre las personas. Eso puede ocurrir de varias formas o
seguir variados modelos, como afirma el investigador y msico popular brasileo
Walter Garcia:
Un ejecutivo de una gran empresa
discogrfica internacional divide sus productos en tres tipos, sin atender a
ms rtulos o rasgos de estilo: msica para la cabeza, msica para el corazn,
y msica para los pies. El primer tipo, afirma, es el que hace pensar. Pero
parece que a la mayora de las personas su escucha no le permite divertirse
mucho, ni emocionarse. Pensar da trabajo. Por el contrario, entretenerse
significa bailar, rer o llorar. La msica que hace pensar es elitista y su
mercado es restringido, aunque el alto poder adquisitivo de quien la consume no
debe ser despreciado. Un artista que hace pensar atiende a un segmento
respetable del mercado, a una franja poco sensible a las oscilaciones de
nuestra economa. La imagen de este tipo de artista da prestigio[1].
En esta declaracin puede
observarse que una de las hazaas de los grupos de rap de la primera generacin fue romper el
bloqueo del sistema, a travs de su integracin con el pblico –ese pblico al cual la historia pertenece,
y a la cual va dirigida–, a travs de
una msica que llama a su pblico a pensar. Aun as, se trata de una msica que
tambin est vinculada al cuerpo y, en ese sentido, puede considerarse msica
para la cabeza y para el cuerpo, pues es un proyecto que produce concienciacin
por medio de la celebracin.
Y es as como el rap se fortaleci y produjo su propio
espacio, a travs de un arquetipo musical y visual nico, pues sus discursos
proponen siempre la visibilidad del espacio y de ese cuerpo en el espacio. Se
trata de una msica que apunta hacia una dimensin cultural e histrica del
espacio: la periferia.
Panoramica de la periferia del Capo Redondo, por
Klaus Mitteldorf
Los paisajes sonoros que
configuran los espacios ocupados por el rap se apropian de un conjunto rizomorfo de
movimiento que se concentra en esos espacios extremos de la ciudad. Y es
sumergindose en esos lugares como se percibe que el rap brasileo se desarrolla a partir de una
especie de bricolage de ritmos que provienen de la msica del Nordeste, de la black music estadounidense, de la samba de los morros
cariocas y de los ncleos de candombl originarios de Bahia, de los que crearon
una poderosa mezcla de sonidos de ambientes interpenetrables[2]; empleo aqu el trmino utilizado por el
investigador estadounidense Erik Davis, quien sugiere que la transmigracin
cultural africana tomada en Amrica equivale a la idea de fusin musical de
espacios complejos de ritmos, lo que genera ambientes interpenetrables. Es el
mismo trmino que utiliza el antroplogo ingls Paul Gilroy en su libro El
Atlntico Negro.
Se observa adems que el
traslado de una sonoridad africana, la transmigracin cultural y los
dislocamientos de identidades puede definir un concepto de dispora negra[3]. Esa dispora del continente africano
como factor externo revela en otros espacios las translocalizaciones internas.
DJ clebre por su
destreza. Fotografa de Rui Mendes
La construccin de la
sonoridad del Rap se
forma a partir de esa reflexin, mostrando as en qu medida es un palimpsesto,
que contiene las bases de ritmos populares de la tradicin negra como el
batuque, el jongo, el lund, la samba, el cateret, el maracat y la congada
(relacionados todos con la danza), el menestrel y el repente nordestino, adems
de los ritmos de raz estadounidense, como el blues, el jazz con mayor tendencia al soul, el rhythm blues, la black music.
Es de esas fusiones que se
adapta el sonido del rap brasileo, el cual se basa muchas veces en la mezcla de dos fuentes de
sonidos originales (el DJ suele manipular de uno a dos pick ups, utilizando discos variados). El
resultado ser la base rtmica del discurso proferido por los MCs.
Eso es lo fundamental del
trabajo del DJ: el que sea capaz de percibir la dinmica de la mezcla en el
tejido sonoro de fondo, construyendo una especie de collage de fragmentos musicales. Con ello,
tambin renueva la presencia de gustos musicales del pasado.
Se trata de un sonido
construida a partir de apropiaciones que nos remiten a una propuesta
revolucionaria, que se realiza a partir de resonancias conceptuales.
A pesar de esto, en la
musicalidad del rap
ese sonido hecho es siempre rehecho, deconstruido, atomizado en pequeos
fragmentos, en notas, y, a partir de ah, reutilizado. Esa construccin de
texturas sonoras, esa tcnica de actuacin en el escenario de la discoteca, procede
de los maestros jamaicanos que crearon el dub[4], segn explica Davis:
Maestros del dub, como King Tubby,
saturaban y transformaban individualmente el sonido de instrumentos con efectos
como reverb, phase, eco, delay, poniendo y quitando voces abruptamente, toques y guitarras en el mix, desnudando la msica
hasta los huesos del bajo / batera, para despus reconstruir todo de nuevo
aadiendo capas de distorsiones, ruidos percursivos y ectoplasmas electrnicos[5].
En rigor, es a partir de ese
modelo de construccin sonora que los rappers desarrollan sus ritmos, y es a partir de esa
accin que los DJs, principalmente los de la primera generacin de rappers de Brasil, la utilizaron. Y en ella se
desarroll una enorme creatividad, a pesar de la falta de recursos tcnicos.
Esos DJs de la primera generacin utilizaban casetes pregrabados, para,
posteriormente, echar mano del recurso de disco-mviles.
No obstante, se ha constatado
que, cuando se emplean esos modelos sonoros, existe un recorrido que lleva
desde la apropiacin de las msicas hasta las tcnicas de sonorizacin. Esos
textos nos posibilitan verificar, en ese bricolage sonoro, aquello que puede sealarse como la
presencia de signos adaptativos y, por extensin, de signos fuertes impregnados
de esa expresin.
Aplicando la perspectiva de la
semitica de la cultura de I. Lotman, se podra decir sobre la Cultura Rap, en
lo referente a sus cdigos sociales, que [dichos cdigos] permiten expresar
esta informacin por medio de determinados signos y tomarla como patrimonio de
estas o de aquellas colectividades humanas[6].
Es decir, que existe una
relacin con el rap
estadounidense, con los mltiples sonidos surgidos en Brasil, pero tambin
existe una identidad genuina de este gnero de fusin, una personalidad propia
nacida del proceso de adaptacin de esas mltiples sonoridades retrabajadas e
insertadas en otro contexto. En definitiva, hay una construccin nueva del
discurso, de la narrativa, de la voz.
Lo que se nos ofrece no es una
versin ms autntica del mito de la favela como espacio, sino una percepcin
del poder de distorsin y del significado social de ese mito. Como revela cada
una de las canciones, las imgenes variables de sus temas son proyecciones de
momentos sociales bien definidos. Porque el papel de las favelas ha cambiado
tan drsticamente, durante las casi tres dcadas que han transcurrido desde el
surgimiento de la Cultura Rap, que lo que percibimos son visiones siempre
nuevas y dramticas de la vida de esos millares de jvenes arrojados a los
bordes.
Estudiar el Rap, a travs del
trabajo de campo directo y de la bibliografa disponible, es, en realidad,
hacer una reflexin interpretativa acerca de la literatura y de la msica
contemporneas brasileas.
Traduccin: Idalia Morejn Arnaiz
Bibliografia
Davis, E.
Raizes e Fios: Ciberespao Polirrtmico e o Black Eletronic in: Item:
Revista de Arte, Afro-Amricas, nmero 5. Rio de Janeiro, Espao Agora/Capacete,
fevreiro de 2002.
Garcia, W.
Ouvindo Racionais MCs in: Teresa: Revista de Literatura Brasileira / rea Literatura
Brasileira. Departamento de Letras Clssicas e Vernculas. Faculdade de
Filosofia, Letras e Cincias Humanas. Universidade de So Paulo, nmeros 4/5.
So Paulo, editora 34, 2003.
Gilroy. P.
O Atlntico Negro. Trad. de Cid
Knipel Moreira. So Paulo, editora 34, 1. Edio, 2001.
Schnaiderman,
B. (org.). Semitica Russa. Trad. de Aurora Fornoni Bernardini, Boris Schnaiderman
e Lucy Seki. So Paulo, editora Perspectiva, 1979.
[1] Walter Garcia, Ouvindo Racionais MCs, pp. 167-168.
[2] Erik Davis, em Razes e Fios. Ciberespao Polirrtmico e Black Eletronic [p. 100].
[3] Como seala Paul Giroy, el concepto de
dispora negra se basa en las nociones de nacin, pueblo, raza y etnia, y, por causa de la esclavitud, se
desarroll como un nuevo paradigma cultural en el Nuevo Mundo.
[4] La palabra dub procede de dupling (doblar, duplicar),
costumbre comn en Jamaica de reconfigurar o de crear una versin rtmica de
determinada banda sonora, transformndola en mltiples bandas sonoras distintas.
La definicin se debe a Eric Davis, Razes e Fios. Ciberespao Polirrtmico
e Black Eletronic, p.
105.
[5] Idem, p. 105.
[6] I. M. Lotman, Sobre o problema da tipologia da cultura, en Semitica
Russa, p. 33.